viernes, 21 de marzo de 2014

La decepción, ese estilo de vida tan quemero...

Sinceramente, siento que tengo que hacer una crónica repetida. La de una nueva decepción. Todos teníamos claro, me incluyo, que era una osadía pensar en un ascenso en esta temporada, pero se había sumado en algún partido, el resto de los competidores no, y algún atisbo de esperanza quedaba, si se seguían sumando puntos, si se iluminaba Toranzo, alguna de Caruso, que se yo...

Pero en los últimos años, Huracán se reinventa, completa sus ciclos y los vuelve a repetir. No deja macana por hacer, tristeza que acumular, sufrimiento que experimentar. En este sentido, en esta nota voy a tratar de no referirme a la cuestión de conducción dirigencial, o al concepto política institucional, sobre lo que podríamos juntos escribir una obra con varios tomos.

Vayamos directo a la crónica de un partido, en el que tras un buen inicio, en donde por poco más de veinte minutos, el Globo tuvo el control del juego y contó con un par de chances importantes, dejó que un rival timorato se reconvierta, que encuentre la ventaja en su primer situación del juego, y que luego transcurra el trámite hasta el final, de manera sencilla, hasta cómoda, e incluso desperdiciando oportunidades de aumentar. En síntesis, una derrota justa, en la que el equipo jamás mostró atisbos de reacción o al menos una pizca de amor propio.








Como anticipé, Huracán arrancó mejor. Kudelka había optado por modificar su esquema habitual y algunos nombres, por lo que aparecían de forma poco prevista, Espinoza por derecha y Gonzalo Martínez por izquierda, bien abiertos, Capurro como único volante central, con Toranzo unos metros por delante, Caruso retrocediendo y Ábila como referencia de ataque. La línea defensiva se mantenía intacta. Y en esos primeros minutos, Capurro era patrón del medio, y los jóvenes por las bandas preocupaban a la defensa rival. En la primera de riesgo, un buen pase de Caruso a Ábila, que se mete al área y su remate pega en la parte exterior de la red del primer poste. Al mismo tiempo, Instituto con poco también molestaba a una defensa que siempre lució indecisa y por momentos inoperante; insistía constantemente por la derecha de la defensa de Huracán, donde Burzio y Favalli pasaban a un Mandarino en flojo nivel y que no tenía un volante que le colabore en la marca. 

No obstante, en ese momento llegó la mejor chance del Globo, cuando tras un centro, un buen cabezazo de Mancinelli se estrelló en el travesaño de Chiarini, y en el rebote, a merced de Ábila, volo muy alto y desviado. A partir de esto, el rendimiento bajó, ya no se llegó en ataque y el partido se hizo parejo. Hasta que en el minuto 35, Mandarino descuida su banda, sale lejos y pierde con Tellechea, quien con buen pase busca a Burzio, que llega al fondo, se hace un pic nic con Mancinelli, y lanza un centro “en cucharita”, que sobrepasa el esfuerzo de Cuesta, y encuentra a un solitario y descuidado Juan Martín, el goleador albirrojo, que habilmente se lanza con la cabeza en una plástica “palomita” y deja sin asunto a Marcos Díaz, que asiste como espectador al gol de Instituto. A todo esto, ¿Arano?. Bien, gracias. Desorientado, sin marca en el área, y desatento, ante la entrada del goleador rival. A partir de allí, Instituto se hizo dueño hasta el final de la etapa, con un Huracán que en ataque no daba pie con bola.

Para la segunda parte, Espinoza pagó los platos rotos suyos y del resto y dejó su lugar a Defederico. Pero nada cambió. Matías siempre comienza bien las jugadas, pero luego se apaga o se cae o nada. El resto, casi ni siquiera intentaba. Toranzo casi no la tocaba, Caruso desapareció y Ábila agudizó, extrañamente (?) su dosis de torpeza. De esta manera, Huracán no tuvo chance alguna en el segundo tiempo. No hubo jugadas en la que Chiarini se esforzara, solo acercamientos, en particular dos. Una pelota suelta en el área, que buscó Cuesta, Masuero parece cometerle penal, y la bola deriva en Mandarino, que es apurado por Favalli en el momento de patear; el árbitro nada dijo. La otra, un buen pase de Toranzo, deja a Ábila solo para que se meta al área rival. Lo hace tan lento, que un defensor lento como Frontini, llega a distraerle la pelota, y el “Wanchope” queda pateando el aire... Eso fue todo lo de Huracán en el segundo tiempo, ante un Instituto que a media máquina, le sobró para inquietar mas de una vez a Díaz, y estar cerca del segundo gol, que finalmente no logró. El ingreso de Kuszko a falta de 15 minutos terminó por darnos la pauta que nada iba a cambiar, y más al final, cuando el DT saca a Toranzo de la cancha, el único jugador al que se le puede caer una idea, para que ingrese Arraya, muy tarde.

Un extraño esquema, con cambios realizados en pésima forma, le da a Kudelka una buena dosis de la derrota. Pero obviamente no sirve cargar las tintas sobre eso, si quienes entran en la cancha simplemente se desplazan, sin la menor actitud y con una notoria apatía. O si esa desidia, se traslada a una extraña indecisión a la hora de resolver jugadas de riesgo, que fue lo que manifiestamente se vio en Ábila, justamente ante su ex club, del cual es simpatizante. Bah, nada que no pueda pasar en Huracán, ¿no?.

Todo esto, es un diagnóstico que no nos puede dejar en el conformismo. Los socios tenemos solo una forma “legal” de exhibir nuestra bronca y es en las urnas, al momento de votar una conducción. Lástima que lo que se vislumbra en el resto es mas de los mismo. En general (habrá tal vez quien se salve), la misma mierda con distinto olor. Dije que no iba a nombrar la política. No se puede. Todo confluye en lo mismo para Huracán...







Síntesis

Instituto (C) 1 - 0 Huracán


Instituto (C): Julio Chiarini; Abel Masuero, Pablo Frontini, Damián Schmidt y Pablo De Miranda; Emiliano Tellechea, Maximiliano Correa, Federico Vismara y Lucas Favalli; Pablo Burzio y Juan Martín. DT: Daniel Jiménez.

Huracán: Marcos Díaz; Germán Mandarino, Federico Mancinelli, Víctor Cuesta,  Carlos Arano; Cristian Espinoza, Alejandro Capurro, Patricio Toranzo, Gonzalo Martínez; Ramón Ábila y Leandro Caruso. DT: Frank Kudelka.

Cambios: 0 2T Matías Defederico por Espinoza (H) / 20 2T Mauro Bellone por Correa (I) / 26 2T Nicolás López Macri por Burzio (I) / 28 2T Leandro Kuszko por Martínez (H) / 30 2T Sebastián Ereros por Tellechea (I) / 43 2T Juan José Arraya por Toranzo (H).

Gol: 35 1T Martín (I) de palomita, tras buena jugada individual y centro de Burzio.

Árbitro: Fernando Espinoza (mal)

Amonestados: Tellechea, Correa, Vismara (I) / Cuesta, Mandarino, Ábila (H)



Figura del partido: Pablo Burzio (I)

Figura de Huracán: no hubo

No hay comentarios:

Publicar un comentario