miércoles, 27 de julio de 2011

El clásico que mi viejo más recordaba...

Mas de una vez le escuché hablar de clásicos con San Lorenzo a mi papá. Bastante de la seguidilla del 76, varios goles de Babington, la década del 90 y el gol del Negro Herrero, pero todo eso era relativamente cercano para mí, todo había ocurrido durante mi vida. Pero su recuerdo, aquel con el cual los ojos le brillaban, era el "gol de Vilanoba a los cuervos". Esa era su mención, la que lo remontaba a abril de 1969, a un momento de su vida de emoción máxima vinculada al GLOBO. Lo imagino en la tribuna visitante de ese "Viejo Gasómetro" de Av. La Plata, apiñado con varios miles, gritando ese gol "sobre la hora" como locos poseídos, el que servía para cortar siete años sin triunfos ante los primos. Y sirvió como aliciente seguro, para pocos días después, engendrarme y transmitirme con mayor fuerza el gen quemero y el amor por Huracán.

Este es el extracto de lo que pasó ese día 20 de abril de 1969, obtenido de la revista "Noticiero Huracán" de Mayo de 1969, casi exactamente 10 meses antes de mi nacimiento:


Parados: Cantú, Vilanoba, Fresneda, Navarro, Dopacio y Chazarreta. Agachados: Hernandorena, Tedesco, Brindisi, Araquem de Melo, Tito Gómez y Giribet. De fondo el "Viejo Gasómetro".



Síntesis

Juez: Aurelio Bosolino. Jugado el 20 de abril de 1969 en San Lorenzo, como visitante

San Lorenzo: Irusta; Villar, Sconfianza, Albrecht, Rosl; Tojo, Amado (P. González), Telch, Veglio; Fischer, Veira. DT: Giudice

Huracán: Navarro; Fresneda, Dopacio, Cantú, Chazarreta; Brindisi, Vilanoba, T. Gómez; Tedesco, Araquem de Melo, Giribet. DT: Alejandro Yebra

Goles: 35 1T Brindisi (H) 0-1 / 38 2T Telch (SL) 1-1 / 43 2T Vilanoba


Por la décima fecha del Metro 69, debíamos enfrentar a San Lorenzo en su estadio, equipo que venía de perder en las dos fechas anteriores, con Central en Rosario y con Gimnasia como local, con dos cambios, Amado por Rendo, lesionado, y Veglio por Pedro González. Habían ganado 5 partidos y perdido 4, con 10 puntos, 19 goles a favor y 15 en contra.

Huracán venía de empatar con Estudiantes, en cancha de Quilmes 3 a 3, en un buen partido que había dejado conforme al DT que no establecía cambios. Llegábamos entonces, con 2 triunfos, 4 empates y 3 perdidos, con 8 puntos, 15 goles a favor y 13 en contra.

Ya a los dos minutos la primera de riesgo para Huracán, con un desborde de Tedesco, y un centro que no pudo conectar Giribet al resbalarse. San Lorenzo avanzaba con toque y Huracán lo esperaba bien parado en el medio. También prevalecía el juego fuerte de la defensa local, sobre todo de Albrecht sobre Araquem de Melo. A los 18, cuando lo pierde Veira, solo de frente al arco por encima del larguero, luego de un rebote que dio Navarro ante tiro de Telch.

Fresneda y Chazarreta anulaban a los wines rivales, mientras que entre Dopacio, Cantú y Navarro desarmaban los intentos de Tojo, Telch y Veira por el centro. Los medios de Huracán continuaban bien ordenados, e iniciaban contrataques profundos. Es así que a los 35 minutos, una escapada de Giribet, con toque hacia adentro, permitió que Brindisi abiera a Tedesco en avance, este desbordó una vez más a Rosl, y devolvió a Brindisi que con gran toque derrotó a Irusta para poner el uno a cero.

Un minuto más tarde, lo pierde de cabeza Araquem por sobre el travesaño a centro de Tedesco. Y al rato nomás, gran atajada de Navarro sobre cabezazo de Fischer para San Lorenzo; y una salvada de Albrecht que rechazó como pudo, una gran jugada entre Tito Gómez y Araquem, que este no pudo concretar.

Para el segundo tiempo, San Lorenzo cambió a Amado por Pedro González, con la idea de darle mayor profundidad. A partir de allí, el local buscó nivelar el marcador con mas fuerzas. También el juego fuerte y malintencionado hizo mella en Miguel Brindisi con un golpe sobre el muslo, y en Fresneda, que recibió un codazo de Fischer. Desde entonces, el medio de Huracán ya no controlaba los embates locales, y un tiro libre de Veira, debió ser desviado con gran esfuerzo por Navarro.

Pero la presión local tuvo su concreción a los 38 minutos, cuando una pelota de la izquierda la tomó Tojo, que tocó a Veira, y este en gran pase al área habilitó la llegada de Telch, que marcó con tiro bajo en carrera, superando a los defensores y a Navarro, que no obstante pudo tocar la pelota, sin evitar el gol.

De todos modos Huracán no perdió la fe y siguió batallando, con un Brindisi visiblemente lesionado y con Giribet tirado al centro para cubrirlo en parte. A esa altura la parcialidad local volvía al canto de "hijos nuestros", cuando a los 43 minutos, el Globo los hizo callar. Foul de Veglio a Giribet, que tomó Brindisi, quien con un medido centro. puso la pelota con rumbo al área chica, donde al borde de ella, Vilanoba con fuerte y medido cabezazo al ángulo, hizo estéril la resistencia de Irusta, que solo tocó la pelota que fue en busca de la red.



Muchos años la gente lo estaba esperando, y llegó la hora del triunfo, con la dicha para la hinchada del Globo. Llantos, desmayos, abrazos, gritos, saltos, todo era válido, en estado de ánimo propicio.

El árbitro añadió dos minutos al juego, mientras crecía Huracán y no llegaba San Lorenzo. Llegando así al fin del encuentro, con la victoria, por dos a uno, que mas que el resultado en sí, era una lección a los locales de lo que se siente cuando uno está frustrado y la otra parte goza del espectáculo. Cosas del fútbol, cosas de los años en que nos tocó a los del Globo..., y ahora les tocaba a ellos...., los matadores... sufrir en carne propia esa situación.

(extractado de la revista "Noticiero Huracán" del mes de Mayo de 1969)

1 comentario:

  1. Saludos de un Cuervo!! buena nota y lindos moementos de nuestro clasico en esas décadas, un abrazo

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