Ganó la emoción

En un juego parejo, se dio un justo empate entre Huracán y Unión, en un partido de pocas emociones de fútbol, pero una gigante para el corazón: el regreso activo, por unos diez minutos en el segundo tiempo, de Patricio Toranzo, tras el grave accidente de Caracas.

Síntesis

Viernes 13 de mayo de 2016

Primera División – Transición 2016 – Zona B – Fecha 15

Huracán 1 – 1 Unión (Santa Fe)

1-0: 30 1T Cristian Espinoza (H) con remate de derecha a metros del área (tras buen pase de Montenegro), que se desvía en Zurbriggen y descoloca a Fernández.

1-1: 46 1T Claudio Riaño (U) define recto al gol, tras buena jugada en equipo que culmina con un pase atrás de Malcorra.

Árbitro: Héctor Paletta (regular)

Amonestado: Acevedo (U)

Huracán: Marcos Díaz; José San Román, Martín Nervo, Federico Mancinelli, Leonel Muller; Matías Fritzler, Mauro Bogado; Cristian Espinoza, Daniel Montenegro, Alejandro Romero Gamarra; Ramón Ábila. DT: Eduardo Domínguez.

Unión (Santa Fe): Nereo Fernández; Emanuel Britez, Agustín Sandona; Santiago Zurbriggen, Nahuel Zárate; Nelson Acevedo, Mauricio Martínez; Lucas Gamba, Martín Rolle, Víctor Malcorra; Claudio Riaño. DT: Leonardo Madelón

Cambios: 23 2T Mariano González por Romero Gamarra (H) / 24 2T Diego Villar por Rolle (U) / 32 2T Julio Rodríguez por Riaño (U) / 34 2T Patricio Toranzo por Montenegro (H) / 37 2T Mauro Pittón por Acevedo (U).

Figura del partido: Santiago Zurbriggen (U)

Figura de Huracán: Patricio Toranzo

Solo con la intención de seguir sumando y cumplir con el calendario, se presentaba por última vez como local en el torneo, el Globo de Domínguez, con la gran novedad de la inclusión entre los suplentes de Patricio Toranzo.

El partido en promedio fue parejo. En el arranque, Unión fue quien lució más concentrado y tomó el dominio. Incluso tuvo la primera de riesgo, cuando Nervo salvó un disparo de Malcorra y luego en el rebote, Acevedo falló por muy poco al arco de Díaz. Los avances del visitante se hacían más relevantes, sobre todo, porque Gamba le ganaba la espalda fácil al debutante quemero Muller, que pasada la primera media hora, pudo ordenar su sector y equiparar las acciones.

De a poco, promediando la etapa, Huracán emparejó de la mano de algo de acción de Montenegro. Un par de centros cruzados al área rival que no fueron alcanzados, y un cabezazo de Fritzler, eran los avisos. Y fue Montenegro, quien en el minuto treinta lo vio picar por el callejón central a Espinoza. Le filtró un buen pase a la carrera, el siete “bravo” dominó y remató fuerte de derecha, a pasos del área. Su tiro, gracias al azar, golpeó en la cola del zaguero Zurbriggen, y dejó sin asunto a Fernández, que caminaba al lado opuesto, para poner la ventaja del Globo, y cortar una sequía tremenda sin marcar en el torneo local.

Pocos minutos después, una definición de Ábila se va ancha por muy poco: era el momento de Huracán. Pero desde el minuto cuarenta, la mano volvió a cambiar y Unión llegó clarísimo, con una palomita de Gamba que por poco no fue el empate, que llegaría casi al cierre de la etapa, cuando tras una buena jugada en conjunto, Malcorra rompe líneas por izquierda, centro atrás y definición simple de Riaño, que escapó al cierre de Muller. Empate y malas noticias para cerrar la etapa.

En la segunda parte, Huracán se paró unos metros más adelantado, pero fue Unión quien lastimaba en sus avances. No obstante, lo tuvo Romero Gamarra quien se quedó sin ángulo tras eludir a Fernández y no la pudo empujar al gol, justo cuando lo encerraron. Otra vez en la mitad de la etapa, emparejó Huracán, esta vez con la mejora de Fritzler en el medio y el trabajo a destajo de siempre de Bogado. Lo tuvo Ábila, a gran pase de Montenegro, pero ganó Nereo Fernández.

Todo siguió parejo, y la emoción llegó, no por un gol o una jugada, sino por un cambio: a los treinta y cuatro, Toranzo volvió a pisar la cancha del Globo y todos juntos derramamos un pequeño lagrimón. Sus ganas de “comerse” la cancha, le dieron demasiado ímpetu, pero igual participó bien en las que tuvo, y hasta ensayó un pase con un lujoso taco.

Poco más pasó de cara al final, con un Huracán al que no le alcanzaban las ganas y un Unión, cómodo con el resultado. Empate con sabor a poco, en una noche que sirvió, para recuperar a la persona y al jugador. ¡Bienvenido Pato!