Ya
parece que ha pasado un siglo. Huracán resignó otra vez puntos como local, en
un partido que parecía accesible en los papeles y del cual fue dominador, pese
a ser golpeado por el rival. Esta vez Llop encontró desde el banco, algún punto
a favor para poder torcer el rumbo.
Dos
partidos como local, ilusionaban a la gente. Si se sumaban seis puntos, el
Globo se podía poner expectante en búsqueda de puestos de ascenso. Ese discurso
se escuchó en la previa, y fue el que llevó en la cabeza una buena cantidad de
quemeros que se dieron cita “en casa” para ver el juego ante Instituto. Pero
todos, y me incluyo, nos quedamos sorprendidos, cuando a los 6 minutos, luego
de un arranque donde Huracán manejaba el balón Sotelo salió a cortar mal y
quedó pagando en el medio con Aguirre que se la lleva y toca para Bazán, quien
se acerca tranquilo sin ser molestado por la defensa local, y devuelve para
Aguirre, quien entrando al área del Globo, ensaya un lindo tiro colocado, que
deja sin asunto a la flojita salida de Islas. Uno a cero rápido del rival, y
esa sensación que siempre regresa a la Quema, de que todo es cuesta arriba para
el Globo.
Feo
comienzo, con una defensa dubitativa (en especial en los laterales, con Sotelo
“regalado” y con un muy flojo Zaragoza) y un bajo nivel del medio hacia
delante. No obstante, como siempre, con más fuerza que ideas, Huracán avanzaba,
tal es así, que en un centro, un cabezazo de Barrientos se convertía en el
empate, y fue muy mal anulado por los árbitros, que lo consideraron en off
side.
Pero
la cosa se ponía peor a los 27 minutos, cuando tras un corner para los
cordobeses, la bola queda suelta mal rechazada, Canever le mete fuerte pero
mordido al arco y Martorell la encuentra de casualidad, y en soledad para
empujarla al gol, apenas habilitado. Dos a cero abajo y miles de dudas que se
agolpaban en el once quemero.
Sin
embargo, otra vez a fuerza de enjundia se reaccionó rápido, y Barrales marcó el
descuento de cabeza, ganando a su marca en lo alto, tras un corner de Milano.
Ese gol en el minuto 31, le daba otro significado al resto del juego, y no
dejaba tan atrás al Globo en el marcador.
Llop
sorprendió con dos cambios en el entretiempo, pero sobre todo al arriesgar un
cambio de esquema. Es que el DT siempre había sido obsesivo para mantenerlo, y
en pocas ocasiones lo había variado. Sacó a los dos laterales (antes
mencionados por su baja perfomance) y planteó un 3-4-1-2, con el juvenil
debutante Leonardo Correale en zaga con Mancinelli y Ferrero, y Sánchez Prette
como enganche para abastecer a Milano, ya como delantero y Barrales. Y fue el
Cordobés, quien al calzarse la pilcha de conductor, hilvanó los mejores
momentos del Globo, en tándem por Busse, Barrientos o Milano.
Y
en un pase de suyo a Milano, quien define mal atorado por Chiarini, y una
definición propia por encima del travesaño, tras pared con Barrales, fue donde
Huracán tuvo sus mejores oportunidades, apretando contra su valla a un
Instituto, que cada vez retrocedía en el campo, y ya no llegaba hasta Islas. El
Globo a esa altura, ya había mutado a un 3-4-3 definido, cuando ingresó, en su
debut, el pibe Cristian Espinoza para pararse como wing derecho, por Danelón,
que se lesionó a los pocos minutos.
La
insistencia quemera dio frutos a los 23 del complemento, cuando tras otro tiro
de esquina, Barrales le vuelve a ganar a su marca, y cruza un cabezazo fuerte y
bien direccionado, que se le escurre a la buena estirada del golero rival
Chiarini. Dos a dos, y parecía que se podía más, cuando un minuto después, el
volente rival Delmonte se va expulsado.
Pero
el segundo gol no dio el impulso suficiente. Las piernas se fueron terminando y
encima Busse se fue expulsado de manera tonta. Espinoza, con buenas apariciones
generando peligro, pero acelerado en el toque final, y el Sánchez Prette
seguían siendo lo mejor, incluso generando que Milano o Barrales tengan
chances, que fueron bien desactivadas por ese buen arquero que tiene Instituto,
que es Julio Chiarini, a la postre, una de las figuras del juego.
Así
se fue el partido, con la impotencia de Huracán que sentía que podía ganarlo y
no le alcanzaba, y con la sensación de punto ganado que se guardó el visitante
hasta el final, a pesar de llevar dos goles de ventaja en algún momento del juego.
Poco
queda de acá al cierre del torneo, que sumar mucho puntos, y buscar de aquí en
adelante que jugadores formarán parte de un nuevo plantel, además de foguear a
estos pibes, como Espinoza y Correales, que tienen pasta y serán necesarios y
útiles en futuro cercano.
Síntesis
Huracán
2-2 Instituto (Cba)
Huracán: Daniel Islas; Leonardo Zaragoza, Federico Mancinelli, Alexis Ferrero,
Guillermo Sotelo: Alexis Danelón, Hugo Barrientos, Walter Busse, Matías
Giménez; Mauro Milano, Jerónimo Barrales. DT: Juan Manuel Llop
Instituto: Julio Chiarini; Cristian Báez, Federico Martorell, Martín Zbrun, Raúl
Damiani; Nicolás Delmonte, Maximiliano Correa, Franco Canever y Marcos Aguirre;
Pablo Burzio y Gonzalo Bazán. DT: Frank Kudelka.
Goles: 6 1T Aguirre (I) con definición precisa a pase de Bazán / 27 1T
Martorell (I) toca al gol un remate de Canever, tras un rebote de un corner /
30 1T Barrales (H) de cabeza tras un corner de Milano / 23 2T Barrales (H) de
cabeza, tras un corner de Sánchez Prette.
Cambios:
0 2T Leonardo Correale por Sotelo (H) y Cristian Sánchez Prette por Zaragoza
(H) / 7 2T Cristian Espinoza por Danelón (H) / 19 2T Valeriano Uriarte por
Correa (I) / 28 2T Cristian Bernardi por Burzio (I) / 35 2T Pablo Soda por
Bazán (I).
Amonestados: Zaragoza, Sotelo, Islas, Milano, Busse (H) / Correa, Delmonte, Báez
(I)
Expulsados: 25 2T Delmonte (I) / 40 2T Busse (H)
Figura
del partido: Chiarini (I)
Figura
de Huracán: Barrales
Este es el video
con alguna imagen del partido
No hay comentarios:
Publicar un comentario